domingo, 28 de julio de 2019

Sitios para perderse: Carrick-A-Rede Rope Bridge

Nos quedamos a dormir en Glenmore Guesthouse, cerca de Ballycastle, un Bed&Breakfast acogedor con unas vistas impresionantes. Incluso pudimos ver Escocia gracias al día claro y soleado que hacía.


Se encuentra a menos de 5 minutos del mirador de Carrick-A-Rede y del aparcamiento del puesto así que después de coger energía con un suculento desayuno, nos dirigimos a la que sería la primera parada del día. Habíamos reservado las entradas con meses de antelación en la web de National Trust. La web da la posibilidad de elegir el horario, y mi recomendación es cogerlas a primera hora (sobre las 9.30h), ya que todavía no habrán llegado los tours organizados y estaréis casi solos. El precio de la entrada es de 9 libras por adulto.




Hay alrededor de 1 km de distancia desde el centro de visitantes, donde está el aparcamiento, hasta el puente. El paseo hasta allí se desarrolla entre acantilados y las vistas de la costa de Antrim son impresionantes. Además, tuvimos la suerte de que hizo un día precioso y ver las aguas cristalinas que los rodean es un espectáculo. Si tienes suerte, dicen que se pueden ver delfines y tiburones (nosotros no la tuvimos).




El puente colgante, situado a 30 metros de altura sobre el mar, fue construido por primera vez por los pescadores de salmón hace más de 350 años. Recorrer sus 20 metros de longitud, sintiendo el balanceo del viento y escuchando el crujir de las maderas, mereció la pena al conseguir llegar a la isla. Yo, que soy una miedica, creo que es totalmente seguro aunque me dio un poco de vértigo.




Los pescadores lo usaron hasta 2002, ya que debido a los cambios migratorios, entonces tuvieron que abandonar esta práctica. Aún queda una cabaña que usaban como almacén y una grúa que servía para izar la embarcación que usaban para extender las redes donde los salmones quedaban atrapados. Esta parte está cerrada y, aunque se puede ver desde el camino, no se puede visitar.



Sin duda, recomiendo visitar este lugar, ya que es uno de los sitos más bonitos en los que he estado. No solo merece la pena por el puente y la isla, sino todo el paraje en el que está situado.

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L.

jueves, 25 de julio de 2019

Sitios para perderse: La Calzada del Gigante

Después de visitar Belfast, decidimos ir a La Calzada del Gigante para ver la puesta de sol ya que nos habían dicho que eran las mejores horas para visitarla. Sin duda, fue la mejor recomendación porque mereció muchísimo la pena. Era un lugar que tenía muchas ganas de ver, pero a la vez sentía miedo por si me decepcionaba después de verlo en fotos. Nada más lejos de la realidad, fue impresionante.

Antes de llegar a nuestro destino, hicimos dos paradas que estaban dentro de nuestra ruta. La primera de ellas en The Dark Hedges, escenario de Juego de Tronos, que fue un adorno creado por los Estuardo para impresionar a los visitantes que se acercaran a su mansión georgiana. Es un lugar con un aura oscura y mágica.



La segunda parada fue el castillo de Dunseverick o lo que queda de él ya que fue atacado y destruido por los vikingos. Se conservan sus ruinas, que están situadas en un acantilado, muy cerca de La Calzada del Gigante.


Por fin llegamos a La Calzada del Gigante (o The Giant´s Causeway), que es Patrimonio natural de la UNESCO. El centro de visitantes ya estaba cerrado así que no pudimos visitarlo, pero tampoco tuvimos que pagar por aparcar el coche y había muy poca gente. Es una maravilla geológica y, además, se cuenta muchas leyendas sobre ella que tienen como protagonista al gigante Finn McCool. 







La historia más conocida, y la que a mí más me gusta, cuenta que Finn tenía un conflicto con otro gigante, Bennandoner, de la isla Staffa en Escocia. Al parecer, en esta isla hay unas formaciones geológicas parecidas a estas (queda pendiente descubrir si es así en nuestros próximos viajes). Por el enfado, se lanzaban piedras el uno al otro y así construyeron un camino entre sus dos hogares. Finn decidió ir a Staffa a darle una lección a Bennandoner pero se da cuenta que éste es terriblemente grande. A la esposa de Finn, Oonagh, se le ocurre una idea. Disfraza a Finn de bebé con la idea de decirle a Bennandoner que su marido no está. Cuando Bennandoner, que ha perseguido a Finn hasta Irlanda, ve al bebé se asusta pensando en cómo de grande será su padre. Huye a Staffa destruyendo la parte central del camino.





La explicación cientifica de cómo se formó estas más de 40.000 columnas basálticas tiene su origen en lava volcánica. No es procedente de ningún volcán sino directamente de grietas del suelo, de las placas tectónicas. Su forma hexagonal se debe al rápido enfriamiento de la lava. Se calcula que se formaron hace más de 60 millones de años y la erosión ha ido retirando otros materiales dejando el basalto de las columnas tal y como lo podemos ver ahora.





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L.

martes, 23 de julio de 2019

Sitios para perderse: Belfast

La primera parada de nuestro viaje por Irlanda fue Belfast. Llegamos al mediodía y realizamos un Freetour con Civitatis para tomar contacto con la ciudad, que empezó desde el Ayuntamiento.

- El Ayuntamiento es un edificio situado en el centro de Belfast y se puede visitar gratuitamente por tu cuenta o en visita guiada. Es curioso que la bandera británica no ondea en él todos los días, sino solamente unos días señalados al año. Está en el plaza de Donegall, donde también se encuentra el Memorial del Titanic.



- El Hotel Europa tiene el récord Guiness de hotel que ha sufrido más atentados por bomba de Europa. Durante "The Troubles", casi todos los periodistas que los cubrían se alojaban en él y se convirtió en un blanco del IRA para situar el conflicto en los periódicos de todo el mundo. En 1985, se hospedaron Bill Clinton y su esposa y, como no tenían suites ya que solo estaban acostumbrados a recibir periodistas, tuvieron que preparar una suite uniendo varias habitaciones. Desde entonces, esa habitación se llama The Suite Clinton. Más recientemente, se han alojado los actores de Juego de Tronos durante el rodaje de la serie.


- The Crown Liquor Saloon es un pub de estilo victoriano al que sin duda merece la pena entrar. En él, se conservan apartados privados, conocidos con snugs, para la gente que prefería beber sin que nadie les viera. Tenían su propio botón mediante un sistema de campanas para avisar a los camareros de que les sirviesen más bebida.


- La catedral de Santa Ana contiene la cruz celta más grande de Irlanda, aunque lo más recomendable es el barrio en el que está. A su alrededor, hay varias calles con pubs, restaurantes y graffitis artísticos no relacionados con el conflicto. Hill Street, por ejemplo, tenía un ambiente muy guay y en donde se encuentra The Dirty Onion, el edificio más antiguo de Belfast, del año 1680, que ha sido reconvertido en un pub.








- El reloj Albert Memorial es similar al Big Ben, pero está torcido como la Torre de Pisa ya que fue construido sobre madera en un terreno pantanoso.

- Desde las orillas del río Lagan, hay vistas al astillero H & W que construyó el Titanic y, en ellas, se encuentra la escultura del Gran Pez, también llamado el Salmón del Conocimiento, que se construyó para celebrar la regeneración del río Lagan.


Después de que finalizase el Freetour en la escultura del Gran Pez, nos acercamos caminando al Museo del Titanic. La altura es exactamente la misma que la proa del trasatlántico lo que permite hacerse una idea de las proporciones que tenía el Titanic. No lo visitamos por falta de tiempo.


Subimos a la azotea del centro comercial de Victoria Square para ver unas espectaculares vistas de la ciudad. Es un mirador gratuito.


El IRA, la división entre católicos y protestantes, entre irlandeses y británicos... marcó muchos años de la historia reciente de esta ciudad por lo que paseamos por las calles Falls Road, Shankill Road, Peace Wall y Divis Street entre murales, muros con vallados y pasos con puertas metálicas en las carreteras que abrían y cerraban el paso. Llama la atención la diferencia tan marcada que sigue existiendo entre los barrios de ambos bandos.








En resumen, me gustó mucho la ciudad por su historia, su arquitectura y sus contrastes a pesar de que solo estuvimos unas horas. Hubiese añadido una visita al museo del Titanic y pasar una noche allí probando su gastronomía y visitando sus pubs.








Para aparcar en Belfast, lo mejor es evitar el centro ya que hay mucho trafico y casi todas las calles son de pago. Recomiendo ir a uno de los barrios de alrededor ya que es gratis y en 15 minutos andando llegarás al centro. Nosotros aparcamos en una calle cercana a Dunville Park.

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L.