Siempre por estas fechas, con el horrible tiempo que hace, me da por recordar el maravilloso verano. con sus pantalones cortos y sus blusas y sus preciosas puestas de sol. Con sus vestidos y sandalias. Con sus fiestas hasta el amanecer. Con su poder dormir hasta las mil. Con sus abanicos y volantes. Con sus días de playa, de piscina, de montaña o de lo que tú quieras porque tienes tiempo libre. De leer libros por placer. De jugar a cartas con los amigos. De quemarte la espalda y tener que echarte kilos de aftersun. Del olor a sal en el pelo. De los paseos interminables. De las excursiones cerca y de los viajes lejos. De los días con la familia, con los amigos, con él.
¡Verano, no tardes mucho en llegar que yo ya te necesito y quiero dejar las Hunter en el armario por una buena temporada!
L.
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